El 6 de febrero de 1922 Damiano Achille Ratti
ocupó la cátedra de San Pedro con el nombre de Pío XI. ¿Y qué tiene esto de especial?
Aparentemente nada, sólo es uno más de los doscientos y pico papas que ha tenido
la Iglesia. Pero el fondo de su política es más que reseñable, porque con él,
con Pío XI, el Vaticano adquirió la condición de Estado independiente. El Estado
con el Índice de natalidad más bajo del mundo. Bien es cierto que fue Pío XI
quien consiguió un Estado para la Iglesia. Pero de no haber sido él hubiera sido otro, porque ya tocaba llegar
a un acuerdo por doble interés: Mussolini quería arrimarse las simpatías de los
católicos y el papa quería de una vez por todas un Estado reconocido en el panorama
internacional. Le tocó reinar a Pío XI y por eso le tocó también a él firmar con
Mussolini los pactos de Letrán, de donde salió Ciudad del Vaticano.
La bronca venía de antiguo, aunque tampoco
conviene remontarse a cuando los papas eran señores feudales y dueños de media Italia
en nombre de los Estados Pontificios. Pero el Estado italiano y el papa se retiraron
la palabra definitivamente en 1870, cuando el rey Víctor Manuel II anexionó a Italia
esos Estados Pontificios; o sea, Roma, porque los papas querían Roma toda para
ellos. Pontificaba por aquel entonces Pío Nono, que ante la decisión del rey
agarró el canasto de las chufas y decretó el auto-cautiverio en el Vaticano. Esto
suena raro, pero fue asi. Es lo que vulgarmente llamamos un encierro.
A partir de Pío Nono los papas se encerraron
y le retiraron a todo el mundo la bendición urbi et orbi. Hasta que Pío
XI, elegido aquel 6 de febrero, pudo reanudar conversaciones con Mussolini, y Mussolini
le dio el completo gobierno de un territorio llamado desde entonces Ciudad del Vaticano.
Por lo demás, muy poco que añadir, salvo que Pío XI pactó con Hitler, bendijo a
las tropas fascistas italianas y se hizo amiguete de Franco. De izquierdas, seguro,
no era.
NIEVES CONCOSTRINA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Procura comentar con libertad y con respeto. Este blog es gratuito, no hacemos publicidad y está puesto totalmente a vuestra disposición. Pero pedimos todo el respeto del mundo a todo el mundo. Gracias.