Jacques Buteaux

Francés misionero en Canada . Nacido en Abbeville, en Picardía, Abril 11, 1600, muertos por los iroqueses salvajes 10 de mayo de 1652. Ingresó en la Compañía de Jesús en octubre de 1620, estudió en La Flèche (1622-1625), era un instructor en Caen (1625-1629), y después de su curso de teología en la Flèche (1629-1633) se convirtió en prefecto al Colegio de Clermont . En 1634 se fue a Canadá y fue enviado a la nueva población de Tres Ríos , donde permaneció durante dieciocho años, ministrando con extraordinario celo a la Montagnais y los algonquinos tribus. Aunque de constitución frágil y delicada, su alma fue despedido con un ardiente deseo de sufrimiento, que nada podía satisfacer. Fue este rasgo de su carácter que más le distingue de las otras heroica hombres quien tuvo dedicado sus vidas a la misma obra. En verdad , no hay peligro, por grande que sea, nunca palideció su mejilla o detuvo su mano cuando no se trataba de servir a Dios o ahorro un alma . Era dotado con un muy especial gracia para infundir sentimientos de piedad en los corazones de la Indios , Y aquellos bajo su cuidado fueron reconocidos por una ternura de devoción y un espíritu de la fe que fueron duraderas y muy de relieve. Buteux mismo ha dibujado un cuadro vivo de uno de sus apostólico viajes a través de un canadiense desierto al final del invierno, de atravesar los bosques sin senderos casi, cruzando montañas, lagos y ríos, vadeando rodilla profundo en la fusión de la nieve, y no pudiendo por causa de todas estas dificultades para llevar suficiente alimento para más de "la guardia de la muerte, en lugar de apoyar vida . ", Su muerte se produjo en uno de sus viajes a los Attikamègues, un Montagnais tribu habita en la parte alta del río St. Maurice. Una tropa de Iroquois acostado emboscados acribillado su brazo derecho y pecho con balas, mientras que los golpes de su hachas de guerra completado la sacrificio . Madre María de la Encarnación , escribe que "su muerte fue una pérdida increíble de la misión." Padre Buteux ha dejado, además de otros documentos, un interesante relato de la cautiverio del Padre Isaac Jogues .

Fuentes

Rochemonteix, Les Jesuites et la Nouvelle-France au XVIIe siècle (París, 1896, I, 294, 265; Thwaites, Relaciones jesuitas, VI, 326 IX, 307;. XXXVII, 9, 19-67; LXXII, 114-115; Sommervogel, Bibliographie des éscrevains de la Compagnie de Jésus, II, 471; VII, 1953.