Los ritos funerarios islámicos están basados en las enseñanzas del Corán y de la Sunna, tradición del profeta Mahoma. El ritual consiste en el lavado del cadáver, amortajamiento, ceremonia religiosa -oración y honras fúnebres- y entierro. El cuerpo debe ser lavado siguiendo unas reglas específicas y luego secado y amortajado en tela blanca. La Tradición Profética recomienda utilizar tres paños blancos para el hombre y dos paños, más tres elementos complementarios, para la mujer, siempre nuevos y de tela normal y corriente. El cadáver se deposita directamente en la tierra, recostado sobre el lado derecho y con la cara dirigida a La Meca. El islam reprueba el embalsamamiento, la cremación e incluso las tumbas y monumentos funerarios. Los allegados pueden expresar su dolor, pero sin excesos. Es contrario a los preceptos de trasladar los restos mortales del difunto a otra ciudad, ya que es aconsejable enterrar a un musulmán en el cementerio de la ciudad donde murió.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Procura comentar con libertad y con respeto. Este blog es gratuito, no hacemos publicidad y está puesto totalmente a vuestra disposición. Pero pedimos todo el respeto del mundo a todo el mundo. Gracias.