La madre de profeta Samuel (1S 1 y 2). Primera esposa de Elcaná, habitante de Ramatayin o Ramá en la montaña en la montaña de Efraín. Estéril durante largo tiempo, obtiene del cielo este hijo primogénito que consagra a Yahvé en su santuario de Siló. Este gesto y su gran devoción son largamente recompensados: después de Samuel, Ana tuvo todavía tres hijos y dos hijas (1S 2,21). En sus labios se pone un bellísimo cántico que celebra la omnipotencia de Yahvé, dueño de los destinos humanos (1S 2,1-10). El que canta en acción de gracias la Virgen María, el Magnificat (cf. Lc 1,46-55), ha tomado mucho de él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Procura comentar con libertad y con respeto. Este blog es gratuito, no hacemos publicidad y está puesto totalmente a vuestra disposición. Pero pedimos todo el respeto del mundo a todo el mundo. Gracias.