Budismo:
Partiendo
de las nociones indias de karma, retribución de los actos, y de
samsara, ciclo de renacimientos o reencarnaciones la enseñanza de Buda
se basa en la ausencia de sí mismo ‑anatma‑, la impermanencia de las
cosas ‑anícca- y el sufrimiento ‑dukkha‑; desarrolla las "Cuatro Nobles
Verdades" sobre la universalidad del sufrimiento que se desprende del
deseo y el camino que lleva a su cesación por el "Noble Sendero óctuple"
(exactitud de la comprensión ‑el pensamiento ‑la palabra ‑la acción
‑los medios de existencia ‑el esfuerzo ‑la atención ‑la concentración).
El nirvana es la extinción de cualquier atadura. La corriente mahayana
puso el acento en la vacuidad de cualquier realidad aparente y exaltó el
ideal de los bodhisattva, comprometidos por votos a liberar a la
humanidad.
Cristianismo:
El
Dios único, creador de todas las cosas, es un Dios de amor que habló
por los profetas de Israel y se reveló en la persona de Jesucristo,
Verbo encarnado de Dios, venido al mundo para liberar a la humanidad del
mal y de la servidumbre. Es el Dios trinitario, presente por su
Espíritu, que inspira a los creyentes. La salvación, aquí abajo y
después de la muerte, es un don gratuito al que los fieles responden con
la fe, la plegaria y un compromiso durante toda su existencia.
Hinduismo:
Las
diferentes escuelas concuerdan en un fondo común: el respeto de los
Vedas, la pluralidad de los acercamientos a lo divino, el ciclo de
creación, preservación y disolución del universo la sucesión de las
reencarnaciones provocada por el fruto de las acciones ‑karma‑ y la
organización de la sociedad en castas.
La
liberación ‑moksa‑ puede ser buscada por diferentes caminos: las
acciones desinteresadas, el control psíquico, la sabiduría de los
sistemas filosóficos y la devoción ‑bhaktial guru o a la divinidad
preferida ‑Ishta Devata.
Islamismo:
"Decid:
Creemos en Dios y en lo que se nos ha hecho descender y en lo que se
hizo descender a Abraham, a Ismael, a Isaac, a Jacob y a las doce
tribus; en lo que fue dado a Moisés y a Jesús; en lo que fue dado a los
Profetas por su Señor; no diferenciamos entre ellos y Le somos sumisos"
(azora 2,136).
Un
solo Dios (en árabe Alá) revela un mismo mensaje ‑adaptado a las
circunstancias de la historia‑ a sus profetas y enviados, el último de
los cuales es Mahoma. Al pacto primordial que liga al conjunto de la
humanidad a Dios corresponde el fin último, el juicio de Dios que hace
de la vida una prueba. En el camino que lleva a Dios ‑la Verdad‑, la
revelación y la fe son la luz y la orientación.
Judaísmo:
Dios
es uno y único ha creado el Universo y todo lo que contiene. Ha creado
al ser humano a su "semejanza", dotándolo de libre arbitrio y
asignándole el papel de perfeccionar la creación. Por la entrega de la
Torá, Dios establece la Alianza con su pueblo. La historia tiene un
sentido y, por su acción, el hombre puede llevarla a su fin: la era
mesiánica libre de violencia y enfrentamientos donde reinará la justicia
para todos (véanselos trece artículos de fe de Maimónides).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Procura comentar con libertad y con respeto. Este blog es gratuito, no hacemos publicidad y está puesto totalmente a vuestra disposición. Pero pedimos todo el respeto del mundo a todo el mundo. Gracias.