Capuciati.

Capuciati es el nombre (de caputium, capucha, casco de protección, que fue uno de sus signos distintivos) de una corta vida católica cofradía también nombrado cofrades de la Paix ("Cofradía de la Paz"). ^[1] Ellos formaron una organización de guerreros dedicado a mantener la paz y el orden en Francia a finales del siglo XII. Ellos se organizaron por primera vez en Le Puy en 1182 y participaron conspicuamente en apoyo de Felipe Augusto contra Esteban I de Sancerre y sus Brabancon mercenarios entonces asola el Orléanais en 1184.

Historia

El Capuciati fueron fundadas en 1182 o 1183 en Francia para la restauración y mantenimiento de la paz. Fue uno de los varios intentos de poner fin a las incesantes guerras y enemistades que fueron extendiendo la ruina y la desolación en todo el país durante el siglo XII. El origen de la Capuciati se remonta a un pobre carpintero de Le Puy , llamado Durand, quien afirmó haber tenido una aparición de la Virgen María en 1182. En esta visión que recibió un papel en el que había una representación de la Santísima Virgen sentado en un trono con una figura del niño Jesús en sus manos, y que lleva la inscripción: "Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, danos la paz". Una asociación se formaría cuyos miembros deben obligarse a mantener y procurar la paz y, como signos distintivos, llevar una capucha blanca y una medalla con una reproducción de la imagen y la inscripción. Durand tuvo un éxito asombroso en la ejecución de estas instrucciones. Una cofradía fue organizado bajo la dirección del clero exactamente en las líneas de cofradías católicas de la época actual. La Iglesia de Nuestra Señora de Le Puy se convirtió en el centro del movimiento, que se extendió con extraordinaria rapidez sobre la provincia de Francia, al sur de Loira.
El Capuciati, además de comprometerse a no jurar en falso, para no blasfemar , no para jugar a los dados, introduzca tabernas, o usar prendas costosas, también se comprometió a hacer todo lo posible para restaurar y mantener la paz. Sus esfuerzos en esta línea no eran ineficaces, una derrota aplastante que la "Routiers", o bandas indisciplinadas de soldados de la época, sostenida en 1183 debe atribuirse en gran medida a la cooperación de la Capuciati con el ejército real francés.
La existencia de la cofradía fue de corta duración. Su desaparición está involucrado en la oscuridad; pero parece que ha dirigido sus esfuerzos en contra de los miembros de la nobleza, y de haber sido eliminados de la existencia de ellos, ayudado por el "Routiers". Su defensa de los heréticos principios no se indica de forma clara y fidedignamente en los registros históricos. La acusación de que no respetaba ni eclesiástica ni la autoridad civil se puede quizás explicar por su resistencia a los abusos reales o imaginarias del poder.
Medievalista Richard Landes señala que un cronista eclesiástico después y hostil expresó una actitud dura "agustino" hacia el comportamiento de los campesinos, ya que desafiaron señorial dominio en su corta vida en el intento de reforma. ^[2]

La liga de los conjurados de Le Puy era sólo una invención diabólica y perniciosa. No había miedo más largo o el respeto a los superiores. Todos se esforzaron por adquirir la libertad, diciendo que pertenecía a los mismos desde los tiempos de Adán y Eva, desde el primer día de la creación. Ellos no entienden que la servidumbre es el castigo del pecado! El resultado fue que ya no había ninguna distinción entre lo grande y lo pequeño, pero una confusión fatal que tiende a arruinar las instituciones que nos gobiernan, a través de la voluntad de Dios y la agencia de los poderosos de la tierra. ^[3]

Otros usos

Capcuceati fue también una designación aplicada a esa clase especial de inglés lolardos que se beneficiaron por la predicación y las denuncias del ex agustino monje, Peter Pateshull (c. 1387), para disfrutar de los actos de iconoclasia . Ellos debían su nombre a su práctica de mantener las capuchas en sus cabezas, en presencia del Santísimo Sacramento.

Fuentes

• Artículo Enciclopedia Católica

Este artículo incorpora texto de una publicación ahora en el dominio público : Herbermann, Charles, ed. (1913). Enciclopedia Católica . Robert Appleton Company.

1. Les Routiers au siècle douzième p.139 en Bibliothèque de l'école des Chartes tomo 3, Hercule Géraud 1842
2. Landes, Richard (2011) Heaven on Earth:. Las variedades de la experiencia milenaria. Oxford: Oxford University Press. p. 520. ISBN 978-0-19-983181-4 .
3. Sot, Michel (2002) Les Gestes des eveques d'Auxerre:. (Classiques De L'histoire Au Moyen Age). París: Les Belles Lettres. pp 180-81.