El ónfalos, que representaba el ombligo del mundo que los griegos creían que se localizaba en Delfos.
Los
griegos creían que el futuro podía conocerse de antemano. Para ello
usaban distintas técnicas de adivinación, que en general consistían en
preguntar a los dioses y esperar una respuesta que se podía revelar de
modos muy diferentes. Los oráculos eran lugares estables en los que las
divinidades desvelaban el futuro.
El
más famoso fue el de Delfos, al que consultaban de modo individual y
también en nombre de los gobernantes y las ciudades. Delfos se convirtió
en un lugar al que acudían griegos de todas partes. En Delfos, el dios
Apolo se manifestaba por medio de una mujer, la Pitia, que entraba en
trance y contestaba de modo incomprensible a las preguntas que se le
hacían; luego los sacerdotes interpretaban estas palabras y ofrecían una
respuesta comprensible.
Preguntas al oráculo
A
los oráculos se les preguntaba toda clase de cosas, incluso algunas que
pueden parecer de menor importancia. Los siguientes ejemplos están
tomados de las consultas del oráculo de Zeus y Dione, en Dodona:
Los de Dodona preguntan a Zeus y a Dione si es la impureza de alguna persona la que está enviando el mal tiempo.
Agis pregunta a Zeus y Dione si las almohadas las ha perdido o si alguien del exterior de la casa las ha robado.
Dios,
¿quién ha raptado al esclavo de Aristocles, fue Arcónidas, Arquebio,
hijo de Arcónidas, o Sosandro, antiguo esclavo de Arcónidas?
Pregunta: Dios, Zeus, Dione, ¿es conveniente que marche a la ciudad de Alicea?
Respuesta: Quédate aquí y espera.
EL ORÁCULO DE DELFOS.
Tholos de Delfos, edificio circular para el culto.
EL ORÁCULO DE DELFOS.
Tholos de Delfos, edificio circular para el culto.
La siguiente reseña, extraída de los libros citados más abajo, explica el origen del oráculo de Delfos:
Cuando
Apolo decidió fundar un santuario al pie del Parnaso, cerca de Delfos,
encontró junto a una fuente una serpiente. Se llamaba Pitón, y Apolo la
mató a flechazos. Pitón pasaba por ser hijo de Gea y pronunciaba
oráculos. Por eso, antes de instalar su oráculo en Delfos, Apolo tuvo
que eliminarla.
Un oráculo había vaticinado que la serpiente Pitón moriría a manos de un hijo de Leto, que era la madre de Apolo. Al saber la celosa Hera que esta se hallaba encinta de Zeus, envió a Pitón para dar muerte a Leto. Pero Posidón recogió a Leto y la ocultó en la isla Ortigia, donde acaeció el parto. Tres días después de su nacimiento, Apolo dio muerte a Pitón y encerró sus cenizas en un sarcófago.
Delfos ha llegado hasta nuestros días como sinónimo de oráculo. La serpiente Pitón era la que guardaba la roca de la que emanaban unos vapores misteriosos que embriagaban a los hombres y les proporcionaban capacidades proféticas. Al vencer a Pitón, Apolo se apoderó del oráculo, delegando la expresión de ese fabuloso poder en una sacerdotisa, la Pitia, cuyas palabras eran interpretadas por un colegio sacerdotal. De este modo, Delfos acumuló un inmenso prestigio y poder, aun antes de la construcción del santuario. Esto le permitió ejercer una influencia directa en la vida de los particulares y de los estados griegos.
Un oráculo había vaticinado que la serpiente Pitón moriría a manos de un hijo de Leto, que era la madre de Apolo. Al saber la celosa Hera que esta se hallaba encinta de Zeus, envió a Pitón para dar muerte a Leto. Pero Posidón recogió a Leto y la ocultó en la isla Ortigia, donde acaeció el parto. Tres días después de su nacimiento, Apolo dio muerte a Pitón y encerró sus cenizas en un sarcófago.
Delfos ha llegado hasta nuestros días como sinónimo de oráculo. La serpiente Pitón era la que guardaba la roca de la que emanaban unos vapores misteriosos que embriagaban a los hombres y les proporcionaban capacidades proféticas. Al vencer a Pitón, Apolo se apoderó del oráculo, delegando la expresión de ese fabuloso poder en una sacerdotisa, la Pitia, cuyas palabras eran interpretadas por un colegio sacerdotal. De este modo, Delfos acumuló un inmenso prestigio y poder, aun antes de la construcción del santuario. Esto le permitió ejercer una influencia directa en la vida de los particulares y de los estados griegos.
LA ADIVINACIÓN.
Bola de cristal, que algunos consideran un elemento de adivinación.
Aunque en la actualidad no existen oráculos hay quienes creen en el poder de ciertas personas para adivinar el futuro a través de las cartas de la baraja (cartomancia), las líneas de la mano (quiromancia) o la bola de cristal. Es muy frecuente encontrar en los medios de comunicación horóscopos que pretenden predecir los acontecimientos que van a ocurrir.
podrias poner la respuesta de las preguntas de los oraculos
ResponderEliminarYo no poseo las respuestas.
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