Secta que surge en Bohemia en los s. XV y XVI. Su nombre era Jednota Bratrská (Unidad de hermanos), y anteriormente Césti Bratri.
Pedro Cheléicky (1390-1460), rico propietario de la Bohemia meridional, es su fundador. Inspiróse en los escritos y doctrina de Valdés (V. VALDENSES) y al igual que él arremetió duramente contra la Iglesia oficial, afirmando que ésta fue corrompida ya en los tiempos de Constantiho al implicarse en asuntos puramente terrenos y temporales. De ahí que urja una vuelta a la pureza de la primitiva Iglesia. Igualmente afirmaba que el culto introducido a la Virgen y a los santos no era más que una aberración posterior, así como la exposición del Santísimo Sacramento. Corrupción que se manifestaba en el esplendor que había alcanzado la liturgia y en el estado tan indigno en que había caído el sacerdocio oficial. El cristiano debía huir de la ciudad y retirarse al campo, donde se encontraba la sencillez de vida. Tampoco debería tener ambición política ni ocupar cargos públicos ya que el Estado es una concepción pagana y opuesta al espíritu de Cristo. Sería pecado mortal ser soldado o defenderse en los tribunales públicos, vestir con elegancia o simplemente divertirse. Así mismo, la ciencia era inútil y peligrosa y nada sería más digno que el trabajo manual. El clero debía vivir de su trabajo y observar el celibato, forma más perfecta que la del matrimonio.
En 1457 un tal hermano Gregorio, primer organizador de la secta, se retiró con un grupo de devotos laicos para fundar una comunidad en la Bohemia Oriental y según la doctrina de Chelt`icky. Ese mismo año se reunieron en Lhotka y se separaron públicamente de la Iglesia de Roma, ordenando tres obispos de entre los suyos, mediante la imposición de las manos de los más ancianos. Hasta 1526 gozaron de cierta tranquilidad durante los reinados de Ladislao II, a pesar del decreto que dio contra la secta en 1503 y 1508, pero que resultó prácticamente sin aplicación. Y así en 1500 contaba la secta con más de 400 comunidades. En 1500 fue elegido obispo el bachiller Luca de Praga, quien dirigió la secta hasta su muerte. Introdujo las primeras reformas, todas ellas dirigidas a mitigar el primitivo rigorismo y a reconciliar la cultura con los hermanos. Se celebraron asambleas y concilios de una manera periódica, presididas por el obispo más anciano («seniore»), el cual hacía de juez y dirige los asuntos corrientes. Pero con el obispo Juan de Augusta, sucesor de Luca, invade a la secta el protestantismo y en 1535 escribe una confesión Impregnada de luteranismo. Juan Blaoslav, obispo desde 1571, resistió al protestantismo a pesar de su formación marcadamente luterana. Asimismo promovió la vida cultural y se patrocinaron algunas publicaciones. Pero este movimiento duró bien poco y la secta fue impregnándose cada vez más de protestantismo, como lo demuestra la «Confesión Bohemia» redactada por los hermanos más insignes en colaboración con los luteranos. En 1609, en tiempos de Rodolfo II, obtuvieron la garantía de la libertad, mediante el decreto «Majestat». Pero nuevamente conocieron el exilio en 1624. Y en la emigración vino la total confusión con los protestantes, en tiempos de Juan Amos Comenius, último obispo de la secta.
V. t.: MORAVOS, HERMANOS; HUSS Y HUSSITAS.
Pedro Cheléicky (1390-1460), rico propietario de la Bohemia meridional, es su fundador. Inspiróse en los escritos y doctrina de Valdés (V. VALDENSES) y al igual que él arremetió duramente contra la Iglesia oficial, afirmando que ésta fue corrompida ya en los tiempos de Constantiho al implicarse en asuntos puramente terrenos y temporales. De ahí que urja una vuelta a la pureza de la primitiva Iglesia. Igualmente afirmaba que el culto introducido a la Virgen y a los santos no era más que una aberración posterior, así como la exposición del Santísimo Sacramento. Corrupción que se manifestaba en el esplendor que había alcanzado la liturgia y en el estado tan indigno en que había caído el sacerdocio oficial. El cristiano debía huir de la ciudad y retirarse al campo, donde se encontraba la sencillez de vida. Tampoco debería tener ambición política ni ocupar cargos públicos ya que el Estado es una concepción pagana y opuesta al espíritu de Cristo. Sería pecado mortal ser soldado o defenderse en los tribunales públicos, vestir con elegancia o simplemente divertirse. Así mismo, la ciencia era inútil y peligrosa y nada sería más digno que el trabajo manual. El clero debía vivir de su trabajo y observar el celibato, forma más perfecta que la del matrimonio.
En 1457 un tal hermano Gregorio, primer organizador de la secta, se retiró con un grupo de devotos laicos para fundar una comunidad en la Bohemia Oriental y según la doctrina de Chelt`icky. Ese mismo año se reunieron en Lhotka y se separaron públicamente de la Iglesia de Roma, ordenando tres obispos de entre los suyos, mediante la imposición de las manos de los más ancianos. Hasta 1526 gozaron de cierta tranquilidad durante los reinados de Ladislao II, a pesar del decreto que dio contra la secta en 1503 y 1508, pero que resultó prácticamente sin aplicación. Y así en 1500 contaba la secta con más de 400 comunidades. En 1500 fue elegido obispo el bachiller Luca de Praga, quien dirigió la secta hasta su muerte. Introdujo las primeras reformas, todas ellas dirigidas a mitigar el primitivo rigorismo y a reconciliar la cultura con los hermanos. Se celebraron asambleas y concilios de una manera periódica, presididas por el obispo más anciano («seniore»), el cual hacía de juez y dirige los asuntos corrientes. Pero con el obispo Juan de Augusta, sucesor de Luca, invade a la secta el protestantismo y en 1535 escribe una confesión Impregnada de luteranismo. Juan Blaoslav, obispo desde 1571, resistió al protestantismo a pesar de su formación marcadamente luterana. Asimismo promovió la vida cultural y se patrocinaron algunas publicaciones. Pero este movimiento duró bien poco y la secta fue impregnándose cada vez más de protestantismo, como lo demuestra la «Confesión Bohemia» redactada por los hermanos más insignes en colaboración con los luteranos. En 1609, en tiempos de Rodolfo II, obtuvieron la garantía de la libertad, mediante el decreto «Majestat». Pero nuevamente conocieron el exilio en 1624. Y en la emigración vino la total confusión con los protestantes, en tiempos de Juan Amos Comenius, último obispo de la secta.
V. t.: MORAVOS, HERMANOS; HUSS Y HUSSITAS.
BIBL.: G. OLSR, Fratrum unitas, en Enciclopedia Cattolica, V, Ciudad del Vaticano 1950, 1752-1754 (con abundante bibl.).
M. PÉREZ GALLEGOS.
Cortesía de Editorial Rialp. Gran Enciclopedia Rialp, 1991
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