Ernest Hello

Filósofo y ensayista francés , b. en Lorient, Bretaña, 4 de noviembre de 1828; re. en Kéroman, cerca de Lorient, el 14 de julio de 1885. Su padre pertenecía a la judicatura francesa y estaba en el momento de su consejero de la muerte en el Tribunal de Casación en París . Legó a su hijo, además de una participación en el pequeño patrimonio ancestral, Kéroman, un nombre honorable y una veneración invencible y amor por la verdad . Ernest Hello era muy frágil desde la infancia, y esta delicadeza de salud, que lo perseguía a través de la vida, fue un gran obstáculo en su trabajo y, sin duda, la fuente del matiz de melancolía que subyace en sus escritos. Desde sus primeros años, Hello manifestó un poder inusual de intelecto . Aescuela en Rennes y más tarde en el Colegio Louis-le-Grand, en París , de donde se graduó a la edad de quince años, fue el primero en sus clases. De acuerdo con los deseos de su padre , leyó la ley y fue admitido después de los exámenes más brillantes, pero se negó a abrazar la profesión debido a una decisión de sus camaradas en el sentido de que un abogado podría no defender conscientemente una causa injusta . Influenciado por su admiración por Gratry y Lacordaire , se sintió atraído por la teología y el abate Baudry, entonces profesor de St-Sulpice, lo instruyó en esta ciencia . El minuciosoEl conocimiento de los principios que Hello adquirió de este modo le permitió utilizar sus propios poderes de percepción con perfecta libertad y ortodoxia . En 1857 se casó con Zoë Berthier, hija de un oficial del ejército y ella misma escritora de alguna habilidad. En el mismo año, junto con Georges Seigneur, fundó "Le Croisé", un periódico diario dedicado a la causa católica . Entre sus colaboradores estaban Léon Gautier, Louis Veuillot , Pere Ventura, Dubosq de Pesquidoux, Oscar Haward y Numa Boudet. El éxito de la revista fue casi inmediato, pero después de dos años fue abandonado, debido a un desacuerdo entre los dos fundadores. Esta fue la gran decepción de la vida de Hello. Posteriormente, escribió para la prensa en general en Francia, Bélgica , e incluso Estados Unidos , "Le Propagateur" de Nueva Orleans recibiendo algunas de sus contribuciones.

El primer libro de Hello, "Renan, l'Allemagne et l'Atheisme" (1858), fue una refutación de Renan, que acababa de publicar su "Études d'histoire religieuse". El libro fue recibido con aclamación y reconocido como el logro de la derrota del famoso apóstata , pero, cediendo al temperamento de los tiempos, los franceses continuaron leyendo a Renan y pronto olvidaron a Hello. Una edición ampliada de este trabajo bajo el título "Philosophie et atheisme" apareció poco después de la muerte del autor. Es, quizás, la mayor de sus obras, exhibe los plenos poderes de su gran mente, su notable comprensión de las verdades básicas , su perfecto control de los instrumentos de filosofía y su propio estilo llamativo.Licenciado en Derecho. Angela de Foligno y del místico Ruysbroeck . Además de estos, sus trabajos publicados son: "L'Homme", "Physionomies des saints", "Contes extraordinaires", "Paroles de Dieu", "Plateaux de la balance" y "Le Siècle". "L'Homme" es considerado por sus críticos como su principal trabajo. Es una colección de ensayos organizados bajo las tres cabezas, vida, ciencia , arte, y unidos por el punto de vista católico de su autor y su relación con los diferentes departamentos de la actividad humana. Desde su muerte, sus obras han pasado por varias ediciones, la séptima edición de "L'Homme" apareció en 1905.y generalmente adoptado en los sistemas de ese día, haciendo uso, en cambio, de los principios de teología y filosofía que se encuentran en las Escrituras. Su clara percepción de los principios fundamentales, unida a su estilo simple y elevado, le ganó una audiencia pequeña pero inteligente y apreciativa a través de la cual su influencia se ha extendido. La "Physionomies des saints" ha sido traducida al inglés bajo el título "Studies in Saintship" (Londres, 1903). Las traducciones de algunos de los ensayos en "Plateaux de la balance" aparecieron hace algunos años en "The Catholic Review" (St. Louis), pero la individualidad de su estilo desafía la traducción exitosa.

Fuentes

TERRE, Ernest Hello (París, 1895); LASERRE, Prefacio a L'Homme y Le Siecle (París, 1905); CRAWFORD, Introducción a los estudios en Saintship (Londres, 1903); BARBEY D'AUREVILLY en Les critiques ou les juges jugés (París, 1885).