miércoles, 30 de agosto de 2017

LA SOMBRA DE BARBARROJA.

Resultado de imagen de BARBARROJA
En 2010, una asociación italiana dedicada a la investigación de fenómenos paranormales afirmó haber recogido tres testimonios de personas que se habían encontrado con una sombra gris que se movía por calles de la ciudad de Pavia. Supusieron que se trataba del fantasma de Federico Barbarroja (1122-1190). Varios testigos señalaron que lo habían escuchado decir “volveré”, en tono firme. Lo único claro y cierto en este asunto es que Barbarroja dejó en vida asuntos pendientes, como apaciguar las tensas relaciones que siempre mantuvo con la Iglesia mientras fungió como emperador del Sacro Imperio Romano Germánico o lavar su participación en la Tercera Cruzada. Y esto porque nunca llegó a Tierra Santa; se dice que murió ahogado en el río Saleph, en Anatolia. Para unos, fue arrastrado por la pesada armadura que portaba; para otros, de un infarto, cuando su envejecido cuerpo entró en contacto con el agua helada.

JOAQUÍN MURAT, EL MARISCAL ERRANTE.


Hay quien cree haber visto la sombra de Murat en el castillo de Pizzo, donde fue fusilado. Su cuerpo desapareció.
Corría el año 1815 cuando Joaquín Murat, entonces rey de Nápoles, fue apresado por el monarca Fernando IV de Borbón y fusilado en el castillo de Pizzo, en la Calabria italiana. Su cuerpo nunca ha sido encontrado, y se especula que esté enterrado en la capilla que él mismo hizo construir en esa fortaleza o quizá en una fosa común en el cementerio local. Incluso se aventura que su cuerpo fuera arrojado al mar y su cabeza enviada a Fernando en señal de victoria.
De una u otra manera, hay personas que aseguran haber visto su espíritu deambular por la nave de la iglesia, a la vez que se escuchan los típicos lamentos y ruidos de cadenas. Un tétrico final para quien fuera nombrado mariscal de Francia en 1804. De hecho, Murat, que había sido cuñado de Napoleón, mostró su valor y astucia militar en batallas tan importantes como las de Austerlitz y Jena, en la que el ejército prusiano fue prácticamente aniquilado.
Además, jugó un papel crucial en el levantamiento del 2 de mayo en Madrid, España, cuando ordenó disparar contra la multitud que se congregaba en torno al Palacio Real y sofocar la rebelión popular a sangre y fuego.

EL NO TAN BUEN REY HUMBERTO I



El anarquista Gaetano Bresci tiroteó a Humberto I de Saboya en Monza. Enterrado en el Panteón de Roma, el rey, según la leyenda, lo recorre como alma en pena.
En el Panteón de Roma se da la posibilidad de encontrarse con el fantasma del rey Humberto I de Saboya (1844-1900), quien fue enterrado en ese lugar. Testigos aseguran haber pasado por ese trance, incluido un carabiniere encargado de la custodia del monumento. La leyenda del hijo del primer rey de Italia, Víctor Manuel II, es famosa en este país. Perdonó la vida a Giovanni Passannante, quien intentó asesinarlo en 1878; amparó la represión que desembocó en la masacre de Bava-Beccaris, donde se castigó de forma sangrienta al pueblo italiano, hambriento por las alzas de los impuestos y el precio del trigo. Este hecho lo hizo perder los apoyos con los que contaba entre las clases humildes y quizá pueda explicar las causas de su asesinato.
Curiosamente, Humberto I fue tiroteado por un anarquista poco después de saber que un coterráneo suyo, que también se llamaba Humberto y había nacido el mismo día que él, había fallecido de un disparo en la cabeza pocas horas antes.

ANA BOLENA, LA USURPADORA QUE PERDIÓ LA CABEZA.

Imagen relacionada
El 19 de mayo de 1536, Ana Bolena, la mujer del entonces rey de Inglaterra, Enrique VIII, fue decapitada en la Torre de Londres acusada de adulterio por su marido. Ana había sido doncella de la primera esposa del monarca, Catalina de Aragón, de quien Enrique se había divorciado en contra de la voluntad papal, lo que ocasionó el célebre cisma de la Iglesia católica que aún hoy perdura. Parece ser que Enrique deseaba tener un hijo varón y que ni Catalina ni Ana se lo pudieron dar, motivo por el que siguió acumulando esposas y locura, hasta su fallecimiento en 1547.
Se cuenta que Ana murió repudiada tanto por su esposo como por el pueblo, que la vio como una usurpadora al trono. Por este motivo su cuerpo fue enterrado en una fosa común en la capilla real de San Pedro ad Vincula, el mismo lugar donde seis años después descansarían los restos de la quinta esposa de Enrique VIII, Catalina Howard, también ejecutada. Aún hoy la leyenda relata cómo el fantasma de la Bolena se pasea, en ciertas horas, por el interior de la Torre de Londres, reclamando justicia con la cabeza bajo el brazo.

lunes, 28 de agosto de 2017

Guillermo de Croy (arzobispo)

Guillermo de Croÿ
Jacques de Bye, William II of Croÿ, ca 1610.jpg

Escudo de la Archidiócesis de Toledo.svg
81º Arzobispo de Toledo
Primado de España
31 de diciembre de 1517-6 de enero de 1521
Predecesor Francisco Jiménez de Cisneros
Sucesor Alonso de Fonseca y Ulloa

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Obispo de Coria
1517

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Obispo de Cambrai
agosto de 1516-1517
Información religiosa
Proclamación cardenalicia 1 de abril de 1517
por León X
Título cardenalicio Cardenal diácono de Santa María en Aquiro
Información personal
Nacimiento 1498
Región Flamenca, Bélgica
Fallecimiento 6 de enero de 1521
Worms, Alemania
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Escudo de Guillermo de Croÿ
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Guillermo de Croÿ (Ducado de Borgoña h. 1497 - Worms, Alemania, 6 de enero de 1521), religioso de origen flamenco, fue arzobispo de Toledo desde 1517 hasta 1521.

Biografía

Guillermo de Croÿ era sobrino de Guillermo de Croy, sieur de Chièvres (castellanizado Xevres), privado, político y consejero de Carlos I de España. Estudió en Lovaina con Juan Luis Vives, el célebre humanista. Fue creado cardenal por el papa León X en el consistorio del 1 de abril de 1517. Además de cardenal, Guillermo era a la sazón y con 20 años de edad obispo de Cambrai, siendo poco después obispo de Coria.
El 8 de noviembre de 1517 fallecía el arzobispo de Toledo, Francisco Jiménez de Cisneros. El Arzobispado de Toledo era el más rico e importante de Castilla, ostentando la primacía sobre las demás diócesis del reino. Su rival principal a ocupar la sede toledana era Alonso de AragónArzobispo de Zaragoza e hijo ilegítimo de Fernando II de Aragón. Finalmente, el apoyo del rey a Guillermo hizo que este obtuviera el cargo. Aun así, tuvo varias obstáculos que entorpecían su nombramiento, el más notable, las normas dictadas por Isabel I de Castilla que prohibían la concesión de oficinas eclesiásticas a extranjeros. El 14 de noviembre de 1517 y a instancias de monsieur de Xevres, el rey naturalizó castellano a su sobrino, consiguiendo evitar este obstáculo legal. León X por su parte le concedió un indulto el 12 de octubre que lo liberaba de residir en territorio diocesano, como ya había ocurrido cuando fue nombrado obispo de Coria.1
Esta suceso fue escandaloso en Castilla. Cisneros había sido universalmente respetado mientras que el nuevo arzobispo era un joven extranjero desconocido. Los representantes en las Cortes de Valladolid de 1518 protestaron ante este nombramiento. Entre otras cosas se pidió que no se naturalizara castellanos a más extranjeros y que el arzobispo residiera en su sede. El rey ignoró la petición por lo que Guillermo nunca vivió en Toledo. Este ultraje fue uno de los muchos detonantes de la Guerra de las Comunidades de 1520. 1

Fallecimiento

Murió en Worms en 1521, aproximadamente a los 24 años de edad a consecuencia de la caída de un caballo en una cacería. Había acompañado al emperador Carlos a esta ciudad, donde se habían convocado las cortes para tratar asuntos con Martín Lutero. Fue sepultado en la iglesia de san Pedro de Lovaina. Al principio, la fecha de su muerte se tomó incorrectamente como 11 de enero.2Alonso de Fonseca y Ulloa fue nombradó nuevo azobispo de Toledo en 1523. Poco de piedad se mostró hacia Croÿ en Castilla. Un relato contemporáneo de Alonso de Santa Cruz, historiador real del rey Felipe II, dijo que "fue un juicio justo de Dios que ni Croy gozó del arzobispado ni fue restaurado el marqués".1​ (Diego López Pacheco, el marqués de Villena, había sido uno de los muy pocos nobles que apoyaban el nombramiento de William, probablemente en un intento de ganar el favor del anciano de Croÿ, pero no logró recuperar sus tierras perdidas). 3

Referencias


Concordio de Toledo

Concordio fue un religioso mozárabe, arzobispo de Toledo entre 758 y 774 aproximadamente.1​ Es uno de los primeros obispos durante el periodo musulmán. No se tienen muchos datos más allá de su nombre; en todo caso debía ser de buena familia, pero lo que es seguro es que, a diferencia de la mayoría de obispos del periodo, no era visigodo,2​ lo que constituye una excepción dentro de los arzobispos toledanos, si bien es posible que a pesar de ser de tradición romana, pudo estar integrado en el grupo de los seguidores de los descendientes de Vitiza, en buena relación con los musulmanes. En un momento de confusión debido al derrumbamiento del estado visigodo, Concordio posiblemente fue uno de los prelados que tuvo que participar en reconstruir la iglesia y adoptar un nuevo estilo de vida de los cristianos bajo dominio islámico.3

Referencias


  • Flórez, 1859, p. 324.

  • Gonzálvez Ruiz, 2011, p. 78.

  • Bibliografía


    Predecesor:
    Sunieredo
    Arzobispo de Toledo
    c., 758-774
    Sucesor:
    Cixila

    Cixila

    Cixila, Cigila, o Cixilanes fue un arzobispo de Toledo de España en el s. VIII que emuló a Ildefonso de Toledo.
    Aunque nunca conoció personalmente a su modelo, a partir de sus escritos aprendió sus virtudes y sabiduría, y divulgó su obra.
    En el año 774 fue nombrado arzobispo de Toledo hasta su muerte en 783. Otras fuentes sitúan su cargo entre 745-754, o entre 752-775 pero no parecen concordar.
    En su época, la conquista musulmana de la península ibérica era muy amplio, por lo que su labor de apoyo era de gran influencia, y los fieles se sentían apoyados por sus consejos y entereza, sirviendo de acicate contra la ocupación del reino visigodo.
    Como parte de la resistencia, se encargó de esconder y proteger numerosas obras de literatura cristiana y reliquias de santos.

    Véase también

    Obras

    • Vida de San Ildefonso
    • Varias poesías en latín. Aunque hay pocos fragmentos, los estudiosos resaltan su belleza de esos párrafos.

    Referencias

    Cerebruno

    1. Cerebruno1​ (Poitiers,?2​ - Toledo, 12 de mayo de 11803​) fue un eclesiástico pictaviense afincado en Castilla, obispo de Sigüenza y arzobispo de Toledo.
      Mencionado como oriundo de Poitou,4​ era arcediano de la catedral de Toledo desde al menos 1143. En 1156 fue nombrado obispo de Sigüenza; durante su episcopado en esta diócesis impulsó la construcción de la catedral de Sigüenza y comenzó la erección de las iglesias de Santiago y San Vicente de la misma ciudad.2​ Por esta época fue designado preceptor del futuro rey Alonso VIII,5​ que durante su infancia en Ávila bajo la tutela de los Castro era el centro de las disputas mantenidas por éstos con los Lara, que pugnaban por hacerse con el infante y con la regencia del reino.
      En 11666​ fue promovido a la archidiócesis de Toledo. En sus funciones como arzobispo tomó parte en las gestiones ante la Santa Sede para la institución de la Orden de Santiago7​ y en la misión diplomática que viajó a Burdeos para traer a la prometida del rey Alfonso VIII de Castilla, Leonor Plantagenet.8​ También consiguió del papa Alejandro III la confirmación de la primacía de Toledo sobre las demás diócesis ibéricas.9
      Según algunos autores, recibió el nombre de Cerebruno por lo voluminoso de su cabeza,1011​ aunque otros conjeturan que Bruno pudiera ser su nombre y Celer (el listo) su apodo.2

      Predecesor:
      Pedro de Leucata
      Obispo de Sigüenza
      1156 – 1166
      Sucesor:
      Joscelmo5
      Predecesor:
      Juan de Segovia
      Arzobispo de Toledo
      1166 – 1180 †
      Sucesor:
      Pedro de Cardona12

      Referencias


    2. También mencionado como Celebruno o Cenebruno.

    3. Toribio Minguella: Historia de la diócesis de Sigüenza y de sus obispos, vol. I, págs. 106-114.

    4. Anales Toledanos, reproducidos por Enrique Flórez en España Sagrada, vol. XXIII, pág. 392.

    5. Diego Sánchez Portocarrero: Nuevo catálogo de los obispos de la santa iglesia de Sigüenza, págs. 18-19.

    6. Gil González Dávila: Teatro eclesiástico de la iglesia de Sigüenza, pág. 149. Este autor señala como su sucesor en Sigüenza a un tal Guillermo, a quien los demás autores no mencionan.

    7. En 1 de noviembre de este año ya era electo de Toledo, según Fidel Fita: Sebastián, obispo de Arcávica y de Orense, en el BRAH nº 42, pp. 325-328 (1902).

    8. Joaquín Escriche: Diccionario razonado de legislacion y jurisprudencia, vol. II, pág. 663.

    9. Enrique Flórez: Memorias de las reynas catholicas, págs. 386-389.

    10. Juan de Mariana: Historia general de España, tomo II, págs. 528-529, reproduce la bula de confirmación de la primacía.

    11. Antonio Martín Gamero: Historia de la ciudad de Toledo: sus claros varones y monumentos, págs. 870-871.

    12. Sixto Ramón Parro: Toledo en la mano, pág. 824.

    13. Algunos episcopologios omiten a Pedro de Cardona por haber sido sólo electo, pues no llegó a consagrarse.

    Alfonso Carrillo de Acuña

    Alfonso Carrillo de Acuña
    Alonso Carrillo de Acuña 1508.gif
    Pintura mural, 1508, Sala capitular de la Catedral de Toledo por Juan de Borgoña.

    78º Arzobispo de Toledo
    Primado de España
    Canciller Mayor de Castilla
    10 de agosto de 1446-1 de julio de 1482
    Predecesor Gutierre Álvarez de Toledo
    Sucesor Pedro González de Mendoza

    Obispo de Sigüenza
    1436-1447
    Información personal
    Nacimiento Carrascosa del Campo, 11 de agosto de 1410
    Fallecimiento Alcalá de Henares, 1 de julio de 1482 (71 años)
    Padres Lope Vázquez de Acuña y Teresa Carrillo de Albornoz
    Escudo de Alfonso Carrillo de Acuña.svg
    Escudo de Alfonso Carrillo de Acuña
    [editar datos en Wikidata]
    Alfonso (o Alonso) Carrillo de Acuña (Carrascosa del Campo, 1410 - Alcalá de Henares, 1 de julio de 1482). Importante prelado de la España del siglo XV.

    Índice

    Biografía

    Escudo de Alfonso Carrillo de Acuña en su sepultura en la Catedral de Alcalá de Henares.
    Sepulcro del arzobispo Carrillo (Jean Laurent ca. 1870) en la Magistral de Alcalá de Henares.
    Alfonso nació en Carrascosa del Campo en el 11 de agosto de 1410. Fue hijo de Lope Vázquez de Acuña, máximo responsable del Concejo de la Mesta, primer Señor de Buendía y Azañón, y descendiente de una familia de nobles portugueses; y de Teresa Carrillo de Albornoz, Señora de Paredes, Portilla y Valtablado, carrascoseña.
    Su familia materna, de ascendencia eclesiástica, pertenecía al municipio conquense de Carrascosa del Campo, y la de su padre, ricohombre de Castilla, portuguesa. Su educación se desarrolló, bajo la influencia de su tío el cardenal Alonso de Carrillo, pasando a estar bajo su tutela a los 11 años. Cuando falleció este, en 1434, recibió el cargo de protonotario apostólico del papa Eugenio IV, accediendo al Consejo Real de Juan II. Para el Concilio de Basilea fue enviado como embajador del rey. Estuvo 16 años ausente de Castilla hasta que regresó para ser nombrado obispo de Sigüenza, sede de la que ya era administrador desde 1436.
    En 1440 el antipapa Félix V lo nombró cardenal, pero lo rechazó ante la falta de legitimidad de este. En 1446 fue nombrado arzobispo de Toledo, convirtiéndose de este modo en el primado de los obispos de Castilla.1
    Actividad política
    Su influencia en la vida política del reino de Castilla, en los reinados de Juan II, Enrique IV e Isabel I fue enorme; su opinión fue muy variable, acomodándose a las circunstancias.
    Tras la ejecución del favorito Álvaro de Luna en 1453, Carrillo apoyó a su sobrino Juan Pacheco, marqués de Villena, el favorito del nuevo rey Enrique IV y desempeñó misiones diplomáticas, para él, ante Francia, llegando a tener un gran poder, superando a muchos nobles. Su codicia y ambición le llevaron a enfrentarse al rey, a partir del momento en que este prefirió cambiar de favorito, alejando a Pacheco y uniéndose a Beltrán de la Cueva y sus aliados los Mendoza, acérrimos enemigos de Carrillo.
    A partir de 1462, Carrillo fue el principal instigador de un bando de nobles castellanos que querían destronar al rey y sustituirle por su medio hermano, el infante Alfonso, y participó muy activamente en la Farsa de Ávila (1465). Comenzó así una larga y cruenta guerra civil en Castilla. Cuando en el verano de 1468 murió el infante, probablemente envenenado por el marqués de Villena, su hermana Isabel le sucedió como pretendiente al trono y tuvo como principal consejero al arzobispo Carrillo, quien junto con su consuegro Pierres de Peralta (Pedro de Peralta y Ezpeleta) desempeñaron un papel importantísimo en el ajuste de su matrimonio con Fernando de Aragón, en octubre de 1469.
    En 1473 convocó el Concilio de Aranda «para combatir la ignorancia y la vida disipada de algunos clérigos».23
    Cuando los Reyes Católicos se hicieron con el poder, al morir Enrique IV en diciembre de 1474, rápidamente chocaron sus intereses. Carrillo no aceptaba el tratamiento autoritario de estos y, por otra parte, se produjo el ascenso a canciller del reino de Pedro González de Mendoza, viejo enemigo de Carrillo, además de haber sido nombrado cardenal, dignidad por la que él había estado luchando. Esta situación le llevó a un enfrentamiento con el Mendoza que perdería en la subsiguiente Guerra de Sucesión Castellana (1475-1479).
    Dando un giro absoluto a su política, Carrillo se integró en el bando liderado por el rey de Portugal que apoyaba los derechos al trono castellano de su sobrina la princesa Juana contra Isabel la Católica. La guerra fue larga y cruel, pero a principios de 1479 una ofensiva de los Reyes Católicos derrotó definitivamente a los portugueses y obligó a Carrillo a someterse y aceptar guarniciones reales en todas las fortalezas que controlaba, para poder continuar como arzobispo de Toledo.
    Murió semipreso en su Palacio arzobispal de Alcalá de Henares el 1 de julio de 1482.4​ Fue enterrado en el monasterio de Santa María de Jesús en Alcalá de Henares. Tras la desamortización de este, sus restos fueron trasladados a la actual Catedral de los Santos Niños Justo y Pastor.56

    Véase también

    Referencias


  • Miranda, Salvador. «The Cardinals of the Holy Roman Church - Biographical Dictionary - Consistory of April 12, 1440». www2.fiu.edu. Consultado el 29 de diciembre de 2016.

  • Mendoza Díaz-Maroto F. El Concilio de Aranda (1473) y el teatro medieval castellano. Criticón. 1984; 26:5-15.

  • Miguel Nieto (director). El Concilio de Aranda (teatro). Aranda de Duero; 2006.

  • «Amigos de la Historia de Villacarrillo». 18 de junio de 2012. Consultado el 29 de diciembre de 2016.

  • Álvarez A, Amador de los Ríos J. Sepulcros del Cardenal Cisneros y del Arzobispo don Alonso Carrillo de Acuña. El Laberinto. 06/10/1845; 2(34):373-5.

  • Bibliografía

    En la ficción

    El personaje del arzobispo Carrillo, interpretado por Pedro Casablanc, aparece en las temporadas primera y segunda de la serie televisiva Isabel.

    Enlaces externos


    Predecesor:
    Alfonso Carrillo de Albornoz
    Template-Bishop.svg
    Obispo de Sigüenza

    1436 - 1447
    Sucesor:
    Gonzalo de Santa María
    Predecesor:
    Gutierre Álvarez de Toledo
    Escudo de la Archidiócesis de Toledo.svg
    Arzobispo de Toledo
    Primado de España

    1446 - 1482
    Sucesor:
    Pedro González de Mendoza

    Pedro de Cardona (cardenal)

    1. Pedro de Cardona
      SOAOTO - Folio 063R.jpg
      Información religiosa
      Proclamación cardenalicia 1181 por Lucio III
      Información personal
      Nacimiento siglo XIIjuliano
      Cataluña, España
      Fallecimiento 1182
      [editar datos en Wikidata]
      Pedro de Cardona (m. 26 de junio de 1182 o 1183) fue un eclesiástico y hombre de Estado español, canciller de Castilla, arzobispo de Toledo y cardenal.

      Biografía

      De origen catalán, nació en el seno de la Casa de Cardona, probablemente hijo del vizconde de Cardona Ramon Folc III de Cardona y de Sibila, que era a su vez hija del conde de Urgel Ermengol VI.1​ Doctorado en derecho civil,23​ fue canónigo de Vich y abad de Husillos. Desde 1178 desempeñó el cargo de canciller de Castilla al servicio del rey Alfonso VIII, aunque en los últimos años residió en Roma;4​ algunos autores lo mencionan como el último de los cancilleres de origen foráneo, pues todos sus sucesores fueron castellanos.5
      Se hallaba en Roma cuando fue propuesto para presidir la archidiócesis de Toledo, siendo confirmado por el papa Alejandro III en julio de 1181;6​ se desconoce si llegó a tomar posesión de la sede. Lucio III le creó cardenal con título de San Lorenzo in Damaso en el consistorio de diciembre de 1181; se supone que como consecuencia renunció a la archidiócesis, según la costumbre de la época, en la que los cardenales no tenían dispensa de residencia.1​ Fue el primer cardenal oriundo de la Península Ibérica, aunque hasta el s. XIX los historiadores eclesiásticos mencionaban como tal a Pelagio Galvani, treinta años posterior.7
      Se le atribuye la redacción de un libro sobre la celebración de la Pascua,8​ de un epítome de las constituciones elaboradas por los emperadores Justiniano y Zenón,2​ y de un tratado legal firmado por un tal Petrus Hispanus, de identidad incierta.3

      Predecesor:
      Cerebruno
      Arzobispo de Toledo
      Julio - Diciembre de 1181
      Sucesor:
      Gonzalo Pérez

      Referencias


    2. Ramón Riu: Primeros cardenales de la silla primada, en el BRAH, tomo XXVII, pp. 137-145.

    3. Antonio García y García: Derecho común en España: Los juristas y sus obras, pp. 67-68.

    4. Antonio Pérez Martín: El Ordo Iudiciarius "Ad summariam notitiam" y sus derivados, p. 61.

    5. Pilar Ostos Salcedo: La cancillería de Alfonso VIII, rey de Castilla, pp. 107-110.

    6. José López Agurleta: Vida del venerable fundador de la Orden de Santiago... Santo Domingo, p. 188.

    7. Salvador Miranda: The cardinals of the Holy Roman Church.

    8. Vicente de la Fuente: Historia eclesiástica o adiciones a la Historia general de la Iglesia, vol. IV, pág. 132.

    9. Sisto Ramón Parro: Toledo en la mano, p. 824.

    Bonito de Toledo

    Bonito (también Bonitus en latín) fue un religioso católico que fue arzobispo de Toledo entre 859 y aproximadamente 892, durante el período de dominio musulmán de la ciudad. Fue sucesor de Wistremiro según el Códex Aemilianense. El catálogo no le adjudica fechas de mandato, pero en la opinión de Flórez fue escogido después de Eulogio de Córdoba, por tanto hacia el 859. Aunque no se tienen datos sobre su vida ni obra, su pontificado fue largo, de más de treinta años de duración. Su sucesor fue un prelado llamado Juan, si bien algunos autores dudaron si había habido algún otro obispo entre Bonet y Juan, Flórez lo sitúa como su inmediato sucesor.1

    Referencias


    1. Flórez, Enrique (1859). España sagrada. Tomo V. Madrid: J. Rodríguez. p. 348.

    Predecesor:
    Eulogio de Córdoba
    Wistremiro
    Arzobispo de Toledo
    859-c., 892
    Sucesor:
    Juan

    Bernardo de Sedirac

    Bernardo de Seridac

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    49º Arzobispo de Toledo
    Primado de España
    10861124
    Predecesor Pascual de Toledo
    Sucesor Raimundo de Toledo
    Información personal
    Nacimiento ¿?
    Fallecimiento abril de 1128
    [editar datos en Wikidata]
    Bernardo de Sédirac (Bernard de Sédirac) o de Sauvetat, Don Bernardo, Bernardo de Cluny o Bernardo de Toledo (Aquisgrán, ? – Toledo, abril de 1128) fue monje cluniacense y arzobispo de Toledo. Ha sido confundido con Bernardo de Agén, obispo de Sigüenza (1124-1151), también monje cluniacense que vino a España, con otros, acompañando a Bernardo de Sedirac a finales del s. XI 1​.

    Índice

    Abad de Sahagún

    No se conoce el año de su nacimiento, y las primeras noticias sobre él lo sitúan en 1080 como monje benedictino en el monasterio de Aux, dependiente de Cluny. Formó parte de la comunidad cluniacense que llegó a Castilla, probablemente requerido por el rey Alfonso VI (influido por su esposa Constanza de Borgoña), e inmediatamente fue nombrado abad de Sahagún en 1081 para sustituir a otro cluniacense, Roberto. Este había sido destituido por el abad Hugo de Cluny tras una petición del papa Gregorio VII, seguramente por su poca diligencia en la sustitución del Rito hispánico por el Romano que había sido establecida por el Concilio de Burgos de 1080. Desde su papel de abad de Sahagún y consejero real desarrolló una importante labor en la aplicación de la Reforma gregoriana, especialmente en lo referente a la disciplina del clero, la expansión de la reforma cluniaciense y a la implantación del Rito romano (bajo su mandato se reorganiza el Scriptorium del monasterio, que se convierte en la fuente de nuevos códices).

    Arzobispo de Toledo

    Tras la reconquista de Toledo por Alfonso VI, en 1085, don Bernardo jugó un papel muy importante en la rendición de la ciudad y en la aceptación del Rito romano por la población, aconsejando al rey que mantuviera la Liturgia hispánica en algunas parroquias toledanas. De hecho, antes de su muerte (el mismo día de la reconquista toledana) el papa Gregorio VII lo había nombrado arzobispo de Toledo, no pudiendo tomar posesión de la sede. Para confirmar el nombramiento viajó a encontrarse con el nuevo papa, Urbano II, en Italia, quien lo invistió arzobispo toledano en 1088, y, además, accedió a que Toledo volviese a ser la sede primada de Hispania. El Papa dirigió una carta desde Anagni a los obispos hispanos dándoles noticia del nombramiento y de su apoyo; en ella decía que tal acontecimiento está de acuerdo con la magnificencia del reino godo:
    « antiquis adtestantibus priuilegiis »

    Actividad reformista

    Sepulcro del obispo Bernardo de Agén en la Catedral de Sigüenza, a veces confundido con Bernardo de Sedirac, que estaría enterrado en la antesacristía de la Catedral de Toledo.2
    En 1091 convocó a los obispos de los reinos de Castilla, León y Galicia en un concilio celebrado en la capital leonesa, donde renovó las normas reformadoras del Concilio de Burgos de 1080. De hecho, su fervor en la aplicación de los preceptos reformistas en la Iglesia hispánica fue reconocido por Urbano II en 1093 (o 1096), cuando le nombró legado en Hispania y en la Narbonense, anulando de esa manera la pretendida primacía de la sede metropolitana de Tarragona que tuvo que aceptar la sumisión a Toledo.
    En 1095 viajó a Francia para encontrarse con Urbano II, quien se encontraba de visita apostólica en la Narbonense, y asistió a los concilios de Clermont y de Nimes (1096). En 1097 convocó un concilio de la Tarraconense y de la Narbonense en Gerona, y durante 1098 se dedicó a confirmar la aplicación de las medidas tomadas. En 1099 asistió en Roma a un concilio durante la Pascua, y consiguió del papa Urbano II una bula por la que las diócesis de Oviedo, León y Palencia se convirtieron en sufragáneas de Toledo.
    Esta visita sirvió de argumento a una de las primeras sátiras antipapales, la llamada Garcineida.

    Últimos años

    Tras el desastre de Alfonso VI en la Batalla de Uclés y la muerte del rey en 1109 vio reducida su influencia en la corte castellana de la reina doña Urraca. Aun así, participó activamente en la tarea reconquistadora y tomó (3 de mayo de 1118) la ciudad de Alcalá de Henares que pasó desde ese momento a depender de Toledo jurídica y eclesiásticamente. Allí mandó construir un palacio arzobispal que sería residencia de los Arzobispos de Toledo en Alcalá.
    Sus malas relaciones con doña Urraca y la aparición de un nuevo papa, Calixto II, cuñado de doña Urraca, tío de Alfonso VII y amigo personal de Diego Gelmírez, hicieron disminuir su poder: en 1120, por ejemplo, el papa Calixto concedió la dignidad metropolitana a Santiago de Compostela, aunque no se tocó la primacía toledana.
    Murió en Toledo durante el mes de abril de 1128.

    Referencias


  • Muñoz Parraga, 1987, p. 24.

  • Bibliografía

    • RIVERA RECIO, Juan Francisco (1962): El Arzobispo de Toledo Don Bernardo de Cluny (1086-1124), Roma, Iglesia Nacional Española.
    • Muñoz Parraga, M. del Carmen (1987): La catedral de Sigüenza (Las fábricas románica y gótica). Publicaciones del cabildo de la SICB de Sigüenza. 560 p.

    Predecesor:
    Pascual de Toledo
    Arzobispo de Toledo
    Primado de España

    10861124
    Sucesor:
    Raimundo de Toledo