I. El término griego dikaiosynê, que no aparece en Mc, Lc ni J n, tiene un sentido ético y otro forense.
V. En Jn, la fe es la única condición para la salvación (= vida) (3,15s; 5,24; 6,47; 20,31; 1 Jn 5,13). Oposición entre Ley y fe, en Hch 13,38s; el perdón de los pecados y el don del Espíritu, aspectos de la rehabilitación, atribuidos a la fe (Hch 10, 43; 19,2).
a) Sentido ético: Rectitud,
honradez o proceder recto u honrado con otros. En la religión judía, el
proceder recto se identifica con la observancia de la Ley, expresión de
la voluntad Je Dios (Mt 1,19; Lc 1,6; 2,25). Como Jesús resume la Ley
como código moral en el amor al prójimo (Mt 7,12) o a Dios y al prójimo
(Mt 22,37-39 par.), «justo» o «recto" llega a significar en Mt el que
practica el amor al prójimo (Mt 25,30.46). En cuanto adhesión a la
voluntad de Dios, el proceder recto es la "fidelidad" (Mt 5,10); como
actitud hacia el prójimo, «justo» es quien practica la justicia (1 Jn
2,29; 3,7.1,0). .
b) Sentido forense: Cualidad
y actuación de un juez que sentencia a favor del inocente, que da razón
al que la tiene, rehabilitándolo ante la opinión pública en caso de
falsa acusación o injusticia por parte de un adversario: «justicia",
"hacer justicia» (Mt 5,6; 6,33; Hch 17,31; Heb 1,9). Para el judaísmo,
Dios tenía que dictar sentencia sobre cada hombre, basándose en su
fidelidad o infidelidad a la Ley y en la práctica o no de buenas obras;
era, pues, una sentencia debida, aunque se admitiera que Dios, con su
generosidad (gracia), supliría lo que faltaría al esfuerzo del hombre.
La sentencia había de pronunciarse en el JUICIO escatológico.
II.
Pablo se inspira en el sentido forense para describir la acción
salvadora de Dios con el hombre (Rom 1,16), reo de muerte por su pecado
(Rom 5,12), pero elevándolo de plano, pues Dios no rehabilita al
inocente, sino al culpable (Rom 4,5). No actúa, por tanto, como juez,
sino como soberano que concede gracia, indulto o amnistía (1,17; 3,21s;
5,21; 8,10). La rehabilitación no es sino graciosa (3,24; 4,16). Única
condición para beneficiarse de esta amnistía es la fe en Jesús Mesías
(1,17; 3,21.24.28; 4,3; 5,1, etc.; GáI2,16.21; 3,11.21s.24; Flp
3,9). Ley y fe son caminos incompatibles entre sí (Rom 3,21; 9,31s;
10,4-11). La observancia de la Ley produce una «rectitud" propia, mérito
del hombre (Rom 10,3; Flp 3,9), que lleva al orgullo (Rom 3,27; Ef
2,8s; Flp 3,3s). No hay que esperar al juicio escatológico para ser
rehabilitado por Dios; la muerte-resurrección de Jesús ha inaugurado la
edad final; la amnistía está proclamada y se va revelando por el anuncio
del evangelio (Rom 1,16s; 3,24s; 4,24s; 5,9; Gál 4,5).
III.
El término «rehabilitación» expresa sólo una faceta de la acción
salvadora de Dios: no ha de concebirse como meramente externa y social,
sino como un cambio interior que hace al hombre agradable a Dios (Rom 5,1s). Por
la fe se concede tanto la rehabilitación (Rom 5,1) como el Espíritu
(Gál 3,4; Ef 1,13) Y la adopción filial (Gál 3,26), se asegura el
cumplimiento de la promesa (Rom 4,16; Gál 3,14), modos diversos de
expresar la misma realidad de salvación. La rehabilitación es obra del
amor de Dios por el hombre (Rom 5,8-10; 4,25) Y es salvación incoada
(Rom 1,16s; 4,13; 5,9.17.21; 8,10; 10,10; GáI3,6.9; d. Ef 2,8s).
Tiene que expresarse en obras, en un modo de vida que se resume en el amor fraterno (Gál 5,6).
Tiene que expresarse en obras, en un modo de vida que se resume en el amor fraterno (Gál 5,6).
IV.
La formulación de Pablo corresponde a la enseñanza y actuación de
Jesús: amor universal de Dios a los hombres (Mt 5,45; 9,13 par.; 11,19),
perdón por la fe (Mc 2,5 par; Lc 7,48-50), gratuidad del perdón (Mt
18,27); la fe, única condición para la actividad bienhechora de Jesús
(Mt 8,2s.13; 9,2.22.28, etc.; cf. 13,58). Entre las condiciones para ser discípulo nunca se menciona la observancia de la Ley.
V. En Jn, la fe es la única condición para la salvación (= vida) (3,15s; 5,24; 6,47; 20,31; 1 Jn 5,13). Oposición entre Ley y fe, en Hch 13,38s; el perdón de los pecados y el don del Espíritu, aspectos de la rehabilitación, atribuidos a la fe (Hch 10, 43; 19,2).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Procura comentar con libertad y con respeto. Este blog es gratuito, no hacemos publicidad y está puesto totalmente a vuestra disposición. Pero pedimos todo el respeto del mundo a todo el mundo. Gracias.