viernes, 19 de diciembre de 2014

Constelación.

Traducción del: 1. Heb. kesîlîm en Is. 13:10, BJ ("luceros", RVR), cuya forma
singular, kesîl, se traduce por "Orión" en Job 9:9,38:31 y Am. 5:8.  El plural
probablemente se refiere a la de Orión* con sus constelaciones vecinas.  2.
Heb. mazzâlôth (2 R. 23:5) y mazzârôth (Job 38:32), que tal vez significan las
constelaciones del zodiaco.*

Representación de la constelación de Orión en el libro Uranometria de Johann Bayer.
Constelación de Orión
Una constelación, en astronomía, es una agrupación convencional de estrellas, cuya posición en el cielo nocturno es aparentemente invariable. Pueblos, generalmente de civilizaciones antiguas, decidieron vincularlas mediante trazos imaginarios, creando así siluetas virtuales sobre la esfera celeste. En la inmensidad del espacio, en cambio, las estrellas de una constelación no necesariamente están localmente asociadas; y pueden encontrarse a cientos de años luz unas de otras. Además, dichos grupos son completamente arbitrarios, ya que distintas culturas han ideado constelaciones diferentes, incluso vinculando las mismas estrellas.
Algunas constelaciones fueron ideadas hace muchos siglos por los pueblos que habitaban las regiones del Medio Oriente y el Mediterráneo. Otras, las que están más al sur, recibieron su nombre de los europeos en tiempos más recientes al explorar estos lugares hasta entonces desconocidos por ellos, aunque los pueblos que habitaban las regiones australes ya habían nombrado sus propias constelaciones de acuerdo a sus creencias.
Se acostumbra a separar las constelaciones en dos grupos, dependiendo el hemisferio celeste dónde se encuentren:
  • constelaciones septentrionales, las ubicadas al norte del ecuador celeste
  • constelaciones australes, al sur.
A partir de 1928, la Unión Astronómica Internacional (UAI) decidió reagrupar oficialmente la esfera celeste en 88 constelaciones con límites precisos, tal que todo punto en el cielo quedara dentro de los límites de una figura. Antes de dicho año, eran reconocidas otras constelaciones menores que luego cayeron en el olvido; muchas, ya no se recuerdan. El trabajo de delimitación definitiva de las constelaciones fue llevado a cabo fundamentalmente por el astrónomo belga Eugène Joseph Delporte y publicado por la UAI en 1930.

Historia de las constelaciones

Constelaciones antiguas

Placa tallada en el templo de Hator de Dendera (Egipto), alrededor del 50 AC, que representa las constelaciones zodiacales.
Debido al tiempo transcurrido y a la falta de registros históricos, es difícil conocer el origen preciso de las constelaciones más antiguas del mundo occidental. Tal parece que Leo (el león), Taurus (el toro), y Escorpio (el escorpión), existían desde antiguo en la cultura de Mesopotamia, unos 4000 años antes de la era cristiana, aunque no recibían esos nombres necesariamente.
Se cree que el interés de estos antiguos pueblos por la disposición de las estrellas tuvo motivos fundamentalmente prácticos, usualmente con propósitos agrícolas, de viaje y religiosos: como ayuda para medir el tiempo y las estaciones y para servir de orientación a navegantes y mercaderes cuando realizaban travesías durante la noche, ya fuese por mar o por el desierto. Así, imaginando figuras con las cuales relacionar los grupos de estrellas (y creando leyendas e historias de lo que representaban —ver mitología, astrología—) les sería más fácil y seguro recordar las rutas a seguir.
De las 88 constelaciones adoptadas por la UAI, casi la mitad provienen de la imaginación de los astrónomos griegos. Homero menciona a Orión en la Odisea (obra que data del siglo IX a. C.). En el Antiguo Egipto era conocido como Sahu mil años antes. El Zodíaco, dividido en doce constelaciones, surgió en Babilonia durante el reinado de Nabucodonosor II siglo VI a. C., vinculado a las doce lunaciones anuales. Lo adoptará la cultura griega, dándole a las constelaciones los actuales nombres.
La compilación exhaustiva de constelaciones más antigua conocida se remonta a Claudio Ptolomeo, quien en el siglo II a. C. presentó un catálogo de 1022 estrellas, agrupadas en 48 constelaciones, en su obra Almagesto; la obra fue escrita en griego, con el título Ἡ μεγάλη Σύνταξις (He Megále Síntaxis: ‘el gran tratado’). Dicho trabajo, que será la base de muchos resúmenes astronómicos occidentales posteriores, hasta finales de la Edad Media, sólo incluía las estrellas visibles desde Alejandría, lugar desde donde Ptolomeo llevó a cabo sus observaciones.

Constelaciones chinas

Carta estelar del libro de Dunhuang, escrito alrededor del año 700. Las constelaciones corresponden a Ursa Major (Osa mayor), Capricornus (Capricornio)y Sagittarius (Sagitario).
Las constelaciones chinas son uno de los agrupamientos estelares más antiguos del mundo. Éstas son muy diferentes de las modernas constelaciones reconocidas por la UAI (que se basan en la astronomía griega); esto se debe principalmente a que el desarrollo de la astronomía china fue independiente, aunque paralelo a la griega.
Los astrónomos chinos dividieron el cielo en 31 regiones, llamados 3 recintos (三垣 sān yuán) y 28 mansiones (二十八宿 èrshíbā xiù). Los tres recintos ocupan la zona cercana al polo norte, por lo que en las latitudes altas se pueden ver durante todo el año, mientras las veintiocho mansiones ocupan la zona del zodiaco, por lo que pueden ser estimados como el equivalente a las doce constelaciones zodiacales occidentales. Contrariamente a la astronomía occidental, las veintiocho mansiones no reflejan el movimiento (aparente) del Sol sino el movimiento de la Luna en su recorrido mensual alrededor de la Tierra.
Los tres Recintos y las 28 Mansiones se dividen además en 283 asterismos. Cada estrella se asigna a uno de los asterismos e incluso algunos de ellos sólo poseen una estrella. Tradicionalmente, una estrella lleva el nombre de su asterismo combinado con un número.
El cielo alrededor del polo sur celeste se desconocía en la antigua China. Por lo tanto, no se incluyó como parte de los tres recintos y las 28 mansiones. Sin embargo, a finales de la Dinastía Ming, Xu Guangqi introdujo otros 23 asterismos basado en las cartas estelares occidentales.

Constelaciones hindúes

Los antiguos agruparon las estrellas en asterismos de manera que formen una figura mas o menos parecida a lo que representan, y que siempre este "en pie". Como en el hemisferio sur, las estrellas boreales se ven al norte y de forma invertida, lo mismo ocurre con las constelaciones, por lo que las figuras se ven iguales pero "al reves". En la imagen se ve a Leo (el león) desde el hemisferio norte (arriba) y el hemisferio sur (abajo)
Las constelaciones de la astronomía hindú se denominan nakshatra (नक्षत्र) o mansión lunar, que corresponden a cada una de las 27 divisiones del cielo, identificadas por la(s) estrella(s) más destacada(s) dentro de las mismas, por las cuales pasa la Luna durante su ciclo mensual. Por lo tanto, cada uno de ellos representa una división de la eclíptica similar a la del zodiaco occidental (13° 20' en lugar de los 30° para cada signo del zodiaco). El periodo orbital de la Luna es de 27.3 días, por lo que la Luna tarda aproximadamente un día para pasar a través de cada nakshatra.
El punto de partida para la nakshatras es el punto de la eclíptica directamente opuesto a la estrella Spica llamado Chitrā (que correspondería aproximadamente al comienzo de Aries). La eclíptica se divide en cada uno de los nakshatras hacia el este a partir de este punto.
La lista de Nakshatras se encuentra en los textos védicos, y también en el Shatapatha Brahmana. El primer texto de astronomía que enumera es el Vedanga Jyotisha de Lagadha. En la mitología hindú los Nakshastras fueron inventados por Daksha, y se personifican como las hijas de la deidad y las esposas de Chandra, el dios de la luna.
Cada uno de los nakshatras se rige por uno de los señores de los nueve graha en la siguiente secuencia:
Este ciclo se repite tres veces para cubrir los 27 nakshatras.

Constelaciones incas

Los astrónomos de la civilización inca identificaron diversas áreas oscuras de la Vía Láctea como animales, y los asociaron con la temporada de lluvias; debido a esto se les conoce como «constelaciones oscuras». Estas áreas son las que comúnmente se denominan nebulosas oscuras.
Es precisamente en Cuzco donde muchos investigadores han encontrado documentos de colonizadores españoles que describen el Templo del Sol, del cual irradiaban cuarenta y un ejes llamados ceques, cuya disposición implicaba lineamientos geománticos o astronómicos, que definían el valle en 328 huacas las cuales cumplían funciones rituales y políticas.
Los Incas conocían la revolución sinódica de los planetas, e igualmente construyeron un calendario lunar para las fiestas religiosas y uno solar para la agricultura. Para tal propósito utilizaron elementos como montículos alrededor de los pueblos para realizar astronomía observacional.
El calendario consistía en un año solar de 365 días, repartidos en 12 meses de 30 días y con 5 días intercalados. Se sabe que el calendario era determinado observando al sol y a la luna. Para fijar las fechas exactas del año y meses, Pachacútec dispuso la edificación de 12 torres o pilares localizados al este de la llacta del Cuzco, llamados sucangas.
Los Incas daban mucha importancia a las constelaciones y estaban muy interesados en la medición del tiempo para fines agrícolas. Poseían sus propias constelaciones y para ellos las Vía Láctea era oscurecida por sacos de carbón. La astronomía jugó un papel muy importante para la construcción de sus ciudades.

Otras culturas precolombinas

  • Los muiscas reconocían la relación entre la salida heliacal de Sirio con el comienzo de la temporada de lluvias.
  • Los mocovíes consideraban a la Vía Láctea como un camino, al que llamaban "nayic", que se adentraba en el monte y en el que a su largo se hallaba jalonado de numerosos asterismos relacionados con relatos de encuentros de chamanes con seres poderosos o "dueños", con los cuales pactaban para poder sobrevivir. Por los movimientos de la Galaxia los mocovíes determinaban los instantes de la noche y los ciclos anuales.1
    En el caso particular de la zona de la Cruz del Sur, el puntero y sus estrellas cercanas representaban dos perros de caza y la cruz del sur en sí el cuerpo central del ñandú acechado, mientras que las restantes estrellas cercanas a la cruz completaban la figura del animal.2
  • En la Patagonia septentrional, hacia el siglo XVI y XVII, se imaginaban que la Vía Láctea era la representación de un campo de cacería de ñandúes, donde los cazadores utilizaban boleadoras representadas por el "puntero" (α y β centauri) mientras que las Nubes de Magallanes representaban los cuerpos de los animales cazados y Las Pléyades (conocida en la región como Los siete cabritos) eran el nido del ñandú.2

Otras culturas

La constelación oscura del "Emú en el cielo", parte de la mitología aborigen brasileña.
Otra cultura aborigen que reconocía figuras oscuras en el cielo eran los australianos, especialmente aquellos que vivían en el centro del continente. También los aborígenes sudamericanos consideraban las manchas oscuras de la Vía-Láctea (nubes con polvo interestelar que absorbe la luz de las estrellas) para formar sus "constelaciones". Una de sus figuras más representativas es "El Emu en el cielo", que abarcaba desde el Escorpión hasta la Cruz del Sur.

El Zodíaco

El zodíaco es una franja del cielo por donde, aparentemente, transitan el Sol y los planetas. Durante el siglo V a. C., dicha región fue dividida en 12 partes iguales (una por cada mes del año) a las cuales dieron el nombre de la constelación más próxima (grupos que muy bien podrían haber existido antes de la invención del Zodíaco propiamente). Estas constelaciones fueron las siguientes. Se ofrecen, primeramente, sus nombres en latín, que son los que se usan comúnmente, luego los nombres en español.
Nro Nombre en latín Nombre en español Elemento Símbolo Duración(tropical) Domicilio
01 Aries Aries, el carnero Fuego (cardinal)
Aries.svg
marzo 21 - abril 20 Marte
02 Taurus Tauro, el toro Tierra (fijo)
Taurus.svg
21 de abril - 21 de mayo Venus
03 Gemini Géminis, los gemelos Aire(mutable)
Gemini.svg
Mayo 22 - Junio 21 Mercurio
04 Cancer Cáncer, el cangrejo Agua (cardinal)
Cancer.svg
22 de junio - 22 de julio Luna
05 Leo Leo, el león Fuego (fijo)
Leo.svg
22 de julio - 23 de agosto Sol
06 Virgo Virgo, la virgen Tierra (mutable)
Virgo.svg
23 de agosto - 22 de septiembre Mercurio
07 Libra Libra, la balanza Aire (cardinal)
Libra.svg
Septiembre 23 - 23 de octubre Venus
08 Escorpio Escorpio, el escorpión Agua (fijo)
Scorpio.svg
23 de octubre - 21 de noviembre Plutón y Marte
09 Sagittarius Sagitario, el arquero Fuego (mutable)
Sagittarius.svg
22 de noviembre - 21 de diciembre Júpiter
10 Capricornus Capricornio, la cabra de mar Tierra (cardinal)
Capricorn.svg
diciembre 22 - 20 enero Saturno
11 Aquarius Acuario, el aguador o portador de agua Aire (fijo)
Aquarius.svg
enero 21 - 19 Febrero Saturno (o Urano)
12 Piscis Piscis, los peces Agua(mutable)
Pisces.svg
febrero 20 - 20 marzo Neptuno (o Júpiter)
  • Nota: Aries es la primera constelación del Zodíaco, comienza sus días el 21 de marzo, el primer día del año de muchos de los calendarios antiguos.
Las constelaciones de esta lista son consideradas las más antiguas, teniendo una importancia evidente en la astrología (disciplina que fue la antecesora de la astronomía).

Constelaciones de Ptolomeo

Argo Navis, la Nave Argo.
Las constelaciones de Ptolomeo (mapa de Durero, 1515).
Además de las doce constelaciones del Zodíaco antes presentadas, Ptolomeo recogió en su inventario otras 36 figuras:
Las 48 constelaciones inscritas por Ptolomeo en el Almagesto fueron las únicas reconocidas en el mundo occidental hasta el final de la Edad Media. Con excepción de Argo Navis, que fuera dividida en cuatro constelaciones más tarde, todas ellas fueron adoptadas sin cambios por la Unión Astronómica Internacional.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Procura comentar con libertad y con respeto. Este blog es gratuito, no hacemos publicidad y está puesto totalmente a vuestra disposición. Pero pedimos todo el respeto del mundo a todo el mundo. Gracias.